viernes, 2 de febrero de 2007

EL NIÑO


Febrero es uno de los meses más agradables del año en Santiago de Chile, si alguna vez quiere viajar a conocer esta ciudad y viene en febrero, se encontrará con una ciudad maravillosa sin contaminación, poca congestión, una temperatura agradable, días con muchas horas de luz y gente menos estresada... En ese contexto hoy en la oficina decidimos salir a tomarnos unos cervezas y conversar un rato, la elección fue el Dublín en Pedro de Valdivia, un lugar desagradable en el que las cervezas parecían té, una atención más parecida a la de un empleado mal pagado, y una carta pobre... después de eso me devolví, y algunos compañeros fueron a otro lugar.

A la vuelta al pasar cerca de Pedro de Valdivia con Santa María, unos niños comenzaron a pedir monedas, la rutina de los días hace reconocer a los personajes urbanos cotidianos, en este caso son dos niños que piden a los autos que se detienen en la eterna luz roja del área, todo sería normal sino fuera porque la madre de los niños se encuentra todos los días y todo el día conversando con otra señora, mientras sus hijos "trabajan" pidiendo.

Al parecer esta realidad no es endémica de nuestros países, eso lo comprobé ayer mientras veía la película belga l`enfant acá excelentemente bien traducida como El Niño. Muchos compatriotas les carga el cine chileno porque se encuentra cargado de marginalidad, como Mala leche, Caluga o menta o Taxi para tres; quiero informarles a ustedes, que el cine europeo también tiene marginalidad... la misma de nosotros, desde siempre desde El Pibe, pasando por El ladrón de bicicletas, los 400 golpes... y esta película ahora.

La historia no puede ser más simple, Sonia una niña de 18 años tiene a luz un niño que le llama Jimmy, su padre de 20 años llamado Bruno (Jeremie Renier), ambos viven con el subsidio de Sonia (Deborah François)que les ha tocado ser padres... en realidad a Bruno, la idea de ser padre no es algo que lo motive mucho, más acostumbrado a reducir las cosas robadas por otros... su vida se centra más en el dinero que puede obtener de las cosas. En fin como padre es la antítesis de Kramer, o de Guido de La Vida es Bella. Sus intereses no cambian directamente con la aparición del bebe.

Con un hiperrealismo los hermanos Dardenne, nos entregan una historia que se esconde en todos los puentes y en los bordes de las carreteras de las ciudades, ¿Qué se puede hacer cuando un niño es abandonado en su acompañamiento? Como la madre que deja que sus niños pidan mientras ella conversa....que hacemos cuando el niño de 7 años del circo lo pasean desnudos unos payasos como parte del show, ¿son mejores padres que esos que venden a sus hijos a familias estériles extranjeras, para que tengan un mejor pasar?, ¿son mejores padres que El Chacal de Nahueltoro que mata a sus hijos porque su esposa ya no vive para criarlos?.

Nadie nos enseña a vivir, no existe un sólo manual, los niños cuando llegan transforman la vida, transforman el amor, a veces lo responsabilizan, sacrifica cosas, revela verdades, desconcierta, entre otras miles de cosas.
En el caso de ésta película se observa claramente que no todos entienden a primera lo que significa ser padres.
Yo que no tengo hijos no imagino que pensarán cuando se van a acostar esos padres que han abandonado a sus hijos, pensarán si comió, si jugó hoy, si es feliz?...

La película en cien minutos muestra a esta joven pareja europea, lo complicado que es ser padres y parejas al mismo tiempo. Debo reconocer que hubo varios momentos en que el silencio me hizo batallar con el sueño, pero no deja de ser interesante pese a lo simple la historia, y entender que al otro lado del océano también hay problemas tan graves como los nuestros.

Un saludo a todos los que han tenido la valentía de modificar sus sueños con la inesperada llegada de sus hijos, como inesperado les agradezco su opción.

Bonus Tracks
1.- Ficha en IMDB
2.- Página de la película
3.- Comentario de la película
4.- Trailer

1 comentario:

verónicabas dijo...

Me la perdi
me la perdi
mela perdi...

snif!, esperare el DVD.

Saludos!