Desde una mesa repleta cualquiera decide aplaudir la caravana en harapos de todos los pobres
desde un mantel importado y un vino añejado se lucha muy bien
desde una mesa gigante y un auto elegante se sufre también
en un amable festín se suele ver combatir.
(Silvio Rodriguez)
A veces creo que uno pierde el tiempo, en general no comulgo con las ONG's, las ecologistas a veces están llenas de fanáticos un poco hippies que defienden a brazo partido algunas de sus propias incoherencias... no me creo esos mensajes al estilo Bono de U2, peor aún encuentro esas campañas de niños buenitos de Un techo para Chile u otras, que por que hacen unas pocas mediaguas ya tienen un poco de cielo asegurado (creo que mientras no demos mejores sueldos y más dignos no superaremos jamás la pobreza)... a lo mejor por lo mismo dejé de comulgar con ello... y eso que en algunos momentos hasta pensé ser sacerdote.
¿Será el dinero que corrompe hasta mis entrañas? no lo se... pero hay casos que a veces siento perdidos, como por ejemplo pelear con una empresa... nadie se atrevería a demandar a telefónica por lo irresponsables a la hora de instalar sus servcios, o a una gran transnacional... mientras nuestras dignidades son atropelladas por sus imposiciones.Así hemos tenido que soportar que algunos les importe poco el tema del medio ambiente, y no porque sólo porque hay que cuidar los cisnes, o por el "futuro mejor de nuestros hijos", simplemente porque contaminamos el aire que respiramos, matamos los animales que comemos, ensuciamos el agua que bebemos, nada más simple que eso.
Uno de los primeros juicios ambientales conocidos (en realidad no tanto) ocurrió en Wobum en Massachusetts, en plena área industrial se vertieron desechos tóxicos al río y con el los aumentos de casos de leucemia empezaron a matar niños... pero a quién culpas cuando el río se contamina? al Estados, a la gente o a los privados... Jan Schlichtmann sabe lo importante que se puede convertir este caso y comienza la búsqueda de responsables.
Una acción civil es una historia de abogados, sin los prejuicios que todos le tenemos a la profesión, se ve a un grupo de personas dispuestas a ganar, a negociar y también a defender su verdad y sus intereses. No sentí lecciones de moralidad, más bien sentí lecciones de Derecho Civil y Derecho Penal, casi como si fuera Teleduc... por lo que creo que es una película obligatoria para estudiantes de derecho. En medio de testimonios te sientes como miembro de un jurado al estilo estadounidense.La justicia tiene precio... y es muy cara (espero no caer en esas manos nunca), y se sabe lo dificil que es luchar contra las grandes empresas, tengo una amiga que todavía pelea doscientos mil pesos con Falabella (que ya van de en dos millones de pesos)... es como golpear un muro gigante y sólo ves sangrar tus nudillos. Los niños murieron por la contaminación ya no vuelven, pero se lucha por un poco de respeto por el medio ambiente que somos nosotros mismos, lo que hacemos, comemos y vivimos. Espero que algún día lo entendamos y que sea pronto. Por ahora nos queda Wabum en Massachusetts, y como primer ejemplo, en Chile ya tenemos el caso del Santuario de la Naturaleza Carlos Andwater contaminado por la celulosa Arauco.
Bonus Tracks
1.- Página en IMDB
2.- Comentario en Filmaffinity
3.- Trailer
4.- Fotogramas
5.- Wobum, Massachusetts
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6.-
