
¿Cuándo establecimos que el amor es hermano de la fidelidad? ¿y cuándo el amor se transformó en compañero del deseo?, creo que cada sentimiento es independiente, corre por su propio carril y habita en nosotros indistintamente, cada sensación actúa en el momento en que el libreto de nuestras vidas lo exige. A veces en plena representación les toca traicionarse, otras veces el amor y la pasión se besan y en el ardor ambos se funden en el sexo.

El miedo a veces inhibe, pero a la vez erotiza la pasión, y las necesidades de odiar transportan al deseo por un ardiente barranco sin detención. La infidelidad es un juego de tres, todos son víctimas y victimarios. Es un elemento del libre mercado,

Pero peor es hacer vista gorda y vivir sabiendo una infidelidad, como si las cosas siguen igual, no hay excusas validas… ni los hijos, ni la casa, ni la plata de mi pareja, ni el que dirán. La dignidad es el combustible de nuestros sentimientos y cuando un amor encierra perdones, los años de frustración y desconfianza se van acumulando la tristeza.
Edward Summer, al percibir incoherencias en las verdades, parece no comprender la situación. Todo se convierte en secretos de perdón, secretos de orgullo y de traición… pero más que engaño a otros, es a la propia conciencia… acá la historia cumple con los cánones morales de Hollywood…

Bonus Tracks
1.- Página en IMDB
2.- Comentarios
3.- Trailer
4.- Comentarios en La Butaca
5.- Escena infiel