
Días de Santiago me regaló la convicción de la realidad urbana común, entre pueblos... me demuestra (lamentablemente) que los prejuicios que hemos creado en nuestras urbes son los mismo, que te juzgan todo el día, juzgan tu pasado para estudiar, juzgan tu pasado hasta para comprarte un refrigerador... así en cada mesón vamos recibiendo nuestras calificaciones... a veces de personas más ineptas que uno...
¿Qué vamos a hacer con los que necesitan adaptarse?,¿qué tipo de sociedad estamos armando en esta selva urbana?.
¿Cuanto tiempo falta para que seamos una sociedad que no juzgue y acoja todas las buenas intenciones de todos sus habitantes que sólo desean hacer que las cosas salgan bien?
Muchos saludos
En especial a todas las visitas del Perú, siempre espero comentarios de ustedes.
Bonus Tracks
1.- Página en IMDB
2.- Comentarios de la película
3.- Trailer