lunes, 20 de enero de 2014

LA NOCHE DEL CAZADOR



La noche me abre su manto, su manto de estrellas blancas: 
compadre: voy a la sierra llevando mi muerte en ancas. 
 Es negro el viento y la tierra, negro el pan y negro el vino; 
si voy subiendo a la sierra más negro se hará el camino.

No se que tiene este 2014 que en sus pocos días ha ido desenmascarando verdades o será que el optimismo típico de enero ha ido reforzando a las personas a asumir sus realidades, lo que lo ha hecho distinto, el tema es que a veces somos menos mágicos de lo que creemos y lo terrenal está más presente en nuestro ser, de lo que realmente quisiéramos que fuera. El problema es que en estos infiernos cercanos hay niños presentes que les ha tocado ver como sus familias se desintegran y como sus papás a veces no han sido lo suficientemente cuidados con lo que hacen o dicen.

domingo, 12 de enero de 2014

LA CACERIA

Hay un ombú en Las Industrias con Departamental, es un árbol grande que sobrevivió a la construcción del corredor de buses de Transantiago que pasa por ese lugar de San Joaquín, al sur de Santiago de Chile. Es un árbol frondoso que su follaje genera un dosel que tapa como una pollera lo que ocurre en el interior, quizás lo mismo pensó ayer la persona que con una cuerda hizo un nudo en una de las fuertes ramas para luego anudarla en su cuello y dejarse caer al fin de sus días.
La noticia en el barrio de mis padres corrió como fuego, muchos partieron a ver el cuerpo colgante que encendía las conjeturas del hecho, ¿era del barrio?, ¿lo hizo por amor?, ¿las drogas lo deben haber llevado a eso?, así la noticia comenzó a transformarse en diversas historias llenas de crímenes pasionales, asesinatos y ajustes de cuentas; algunos dicen que incluso fue Chilevisión... pero la verdad ¿a qué noticiario le importa que una persona se suicide colgándose de un árbol?, así la vida del barrio fue transformando la única certeza, un cuerpo colgado, en el material para las más oscura conspiraciones barriales.

domingo, 5 de enero de 2014

LA HISTORIA DE ADELE H.

Tanto que me decía la gente: 
«Gavilán, gavilán tiene garras». 
Y yo sorda seguí monte arriba, 
gavilán me sacó las entrañas. 
En el monte quedé abandonada; 
me confundan los siete elementos. 
Ay de mí, ay de mí, 
ay de mí, ay de mí. 
De mi llanto se espantan las aves, 
mis gemidos confunden al viento, 
ay de mí.
(Violeta Parra)

Amar no es lo mismo que querer, lo primero es un sentimiento lo segundo un deseo y se vuelve peligroso cuando algunos creen que querer es sinónimo de amar, en especial cuando no es algo correspondido... me ha tocado escuchar y ver como hace unos días un tipo le manda mensajes de amor a una colega, creyendo que con eso la enamorará o por último la excitará. Por el contrario tanta insistencia (de un tipo casado) con ella ya va por senderos en que las alucinaciones propias del querer lo pueden confundir.