Mi primera aproximación a Cantando bajo la lluvia, fue como a muchas personas gracias a Alex, la semilla de maldad de La Naranja Mecánica de Kubrick, curiosamente en su interpretación a punta de patadas y bastonazos al anciano mendigo... Lo primero que no entendía era como una engendro del demonio podía cantar la canción de un musical de los años 50.
La respuesta es más que simple, Cantando bajo la lluvia es una gran película, el DVD lo arrendé junto con Contacto en Francia, el tipo de mi reconciliado Blocksbuster me advierte... "Cantando bajo la lluvia es una de mis películas favoritas"... yo ya en ese momento me asustaba...no vaya a ser otra perturbada mente como la de Alex?...Así que agarré las películas y salí arrancando...
Llego a mi casa, pongo el DVD y aprieto play... me encuentro con que la película comienza con la canción principal cantada por los tres protagonistas... entendí de inmediato que la canción ya existía antes de la película... Después la entrada al Avant premier de una película al estilo más glamoroso de Hollywood, veo la primera canción y entiendo porque los musicales eran tan fantásticos... por que Gene Kelly bailaba de una forma increíble.Cantando bajo la lluvia contiene una parte de la historia del cine, que muchos no alcanzamos a vivir... cuando se pasó del cine mudo al sonoro con todo lo que esto significó, Cuando el cine ya era un éxito y comenzaba su época preglobalizadora y las películas de Buster Keaton, Chaplin y Rodolfo Valentino eran las imágenes soñadas de mis abuelos, de hecho mi abuelita Mirza era una calcetinera fanática de Valentino... El cine sonoro comenzó como un gran adelanto y a la vez en el terror de los actores... de hecho Valentino y Keaton fueron algunas de las víctimas de este adelanto...
De El Cantante de Jazz en adelante la luz se transformó en imagen, la imagen en sonido, el sonido se convirtió en música, la música se hizo baile, el baile se acompañó de la alegría y la alegría se transformó en victoria, como la victoria de los aliados contra el nazismo, que ensalzó la felicidad de la posguerra, después de tanto horror, tanta muerte, las lágrimas se habían secado, ahora importaba ser felices, amar, bailar, ¡Que importa la realidad!, ahora ha vuelto la magia, no la de la edad media que aterrorizaba, era la magia de George Melies, la de Hollywood... La Felicidad que iba a ser eterna, porque nuestro verdadero Reich estaba instalado en los valles de California.
Eso muestra Cantando bajo la lluvia, muestra que el cambio es una oportunidad, la opción de crear nuevos desafíos, en Cantando bajo la lluvia todas las situaciones que ocurren son reales (como el uso de dobles al estilo de Milli Vanilly de los 80, como se presenta el cine sonoro, los problemas con los primeros micrófonos), a la vez todas las canciones (salvo una "Make'Em Laugh") era de musicales ya presentados, por lo que la película era una especie de Moulin Rouge de la época. En fin la película me hizo feliz, hasta me dieron ganas de bailar, y a la vez que gana de que cantáramos y bailáramos en todas partes, sin duda Santiago de Chile sería una ciudad menos estresada y más alegre. No nos importaría nada, y cantaríamos bajo la lluvia, porque que importa el parte que me sacaron por velocidad, ni que me cierren la cuenta corriente, total la lluvia cae sobre mi cara, estoy vivo y canto bajo la lluvia.
...I'm dancin`and singin' in the rain.
Esta entrada está dedicada a mi amiga Karina Ramírez, quien en esos años 90 me hizo querer a los musicales.
Bonus Tracks
1.- Ficha en IMDB
2.- Comentarios de la película
3.- Sobre el paso del cine mudo al sonoro
4.- Curiosidades de Cantando bajo la lluvia
5.- La canción mítica cantada por Gene Kelly.
6- La escena más memorable de todos los musicales de todos los tiempos