sábado, 2 de enero de 2010

FAHRENHEIT 451

En la fiesta de año nuevo, nos acordábamos de una periodista de canal trece que en uno de sus debates le decía al candidato de la izquierda, con tono de ridiculez, para que Chile iba a perder tiempo realizando una reforma constitucional. Yo encontré insólito la "pregunta" de una persona que parece ser informada que crea que una de las cosas más sagradas de un estado, como la constitución para ella sea perder el tiempo. Pero después de escuchar a los otros candidatos entendí el porqué de la pregunta, la televisión y los diarios han hecho de Chile un país sin savia. Ahora es más importante los problemas "reales" de la gente, como la delincuencia... escuchamos a los noticieros creando un clima de miedo y a un candidato cantando rancheras. Es que es más importante todos los días ver quien será la nueva cara que saldrá en LUN por cualquier cosa que crear una sociedad más justa y equitativa.
La labor realizada hace unos cuantos años de quemar libros y olvidar personas fue realizada con éxito rotundo en Chile, no fueron exactamente los bomberos, fueron los militares y parte de una prensa de la época que se encargó de incinerar el pasado, barrer las cenizas y construir un futuro hecho con el hule de las gigantografías que pueblan las calles.
Todo fue previsto Ray Bradury en parte inspirado por la Alemania Nazi y más aún por la política que Estados Unidos tuvo en los años cincuenta, cuando comenzó a prohibir libros marxistas... en una època de un futuro, los bomberos tendrán otra misión, las casa ya no son inflamables y las mangueras transportan keroseno. Las letras ha desaparecido, sólo existe la imagen y la felicidad impuesta por el gobierno. Todo parece bien, porque ya no se lee, los programas de televisión son los que educan y los pasquines sólo traen imágenes que se explican solas, ya no es necesario pensar tanto porque todo se ha hecho más simple para que la mente viva feliz.

Guy Montag (Oskar Werner) es un bombero ejemplar que pronto será ascendido, en el camino a su casa por el monoriel se encuentra con Clarisse (Julie Christie) una profesora que tiene algo poco común, pregunta mucho. En una sociedad en que todas las respuestas están en una pantalla, es raro que una casa no tenga antena... pero es cierto también ¿por qué quemar tantos libros? que han hecho ellos que parece ser algo terrible. En medio de un allanamiento se descubre una biblioteca secreta, en la que la dueña prefiere morir quemada con sus libros. Para Montag es la confirmación de que algo importante dicen los libros y silenciosamente comienza a guardar libros para descubrir el tesoro que se encuentra en ellos. Las mismas técnicas que utiliza para encontrar libros en casas rebeldes ahora las usa para esconderlos.

Su esposa (Julie Christie) es feliz mirando la televisión, para ella no hay mayor entretención que eso, sin darse cuenta que la vida es vacía. En fin el mundo de Bradury mostrado con la cámara de Truffaut no se aleja mucho de nuestro mundo actual. La televisión y los diarios nos alejan cada vez del verdadero pensamiento individual, nos convierte en psitácidos que repiten, piensan y opinan las mismas cosas que los diarios muestran... así hemos sido capaces de votar por candidatos inventados, escuchar cantantes de baja calidad artística, ver películas sin sentido, sentarnos a opinar de los realities y opinar mal de algunos gobiernos extranjeros sin tener idea de los procesos sociales que conducen a las decisiones. Si algunos son capaces de votar por un candidato que le dará impuestos solo a los "libros buenos" nos damos cuenta de que una vez más hemos quemado nuestros libros, con el combustible de la ignorancia, necesitaremos de nuevo de esas personas que conservan un poco de razón para seguir creyendo que lo que escribimos sirve para algo.

Saludos a todos

Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Farenheit 451 en Wikipedia
4.- Farenheit 451 en la página de Truffaut
5.- Trailer de la película

2 comentarios:

Unknown dijo...

Hace un par de días comentabamos con mi chico esta película. La vimos en el instituto despues de leer el libro y con aquella juventud nos pareció una adaptación malísima, pero estoy segura que dándole otra oportunidad me gustará mucho más.
Maravillosa entrada relacionandola con vuestra situación política y cultural en Chile. Aquí en España no hace falta quemar los libros porque la mayoria de gente está idiotizada con una televisión de maleducados que explican sus vidas, gritan y se insultan entre ellos. ESO divierte más que la cultura...

Rogolagos dijo...

Guaci
Es cierto el libro es mucho más completo, yo en general no espero ver el mismo libro cuando voy al cine... si espero ver más cine del libro... en el caso de ésta película que se arranca en parte del común de Truffaut... se crea un ambiente utópico... muy parecido a 1984 de Orwell.
un gran abrazo... y a luchar en contra de la quema de neuronas que hacen los medios de comunicación.