UNA MUJER CASADA

Stay, lady, stay, 
stay with your man awhile 
Why wait any longer for the world to begin 
You can have your cake and eat it too 
Why wait any longer for the one you love 
When he's standing in front of you.

Quédate, dama, quédate
quédate con tu hombre un rato
por qué seguir esperando al mundo
puedes coger tu tarta y también comerla
por qué seguir esperando por el que amas
si está en pie frente a ti.
Bob Dylan, Lay lady lay

Un verso de Silvio Rodríguez decía que "la cobardía es asunto, de los hombres y no de los amantes" pero en realidad la vida de los que aceptan un amor compartido tiene más tristeza que el placer intenso del encuentro furtivo. Eso que se confunde entre la pasión y amor verdadero se convierte en una trampa en que caen los amantes. Siempre hay una cuota de cobardía en el que engaña, de preferir lo establecido por sobre lo que podría tener.

El cuerpo de una mujer siempre es hermoso, a veces ellas no nos creen cuando las encontramos bellas, pese a que ellas crean que estan feas, desnudas son siempre maravillosas.  En el caso de Charlotte (Macha Méril) en su desnudez es feliz de sentir como las manos de Robert (Bernard Noël) su amante pasan por su existencia. Pueden estar toda la mañana juntos besándose, acariciándose como dos primerizos que aprenden a descubrirse el uno al otro. Mirar los detalles del otro nos puede llevar horas descubriendo colores, lunares y sabores que se llevan consigo. Así está Charlotte y Robert mientras están juntos. Pero ahora que comienza a llegar la hora de partir todo el placer de la compañía se va volviendo rapidamente algo intangible que se desvanecerá en los establecido con su esposo e hijastro., todo para verse en un tiempo  más nuevamente.

Al llegar a casa Pierre (Philippe Leroy), su marido le espera, cansado de sus viajes de piloto, solo piensa en besar a una mujer que parece distante. Algunas veces ha tenido dudas de ella y ha contratado un investigador privado que la ha seguido descubriendo su infidelidad. El mayor defecto de Charlotte, según ella, es la mentira, mientras que el de él es amar tanto a su esposa. Pero en ese contexto van paseando diversos conceptos por la conversación entre esposos. ¿ Se puede amar a dos personas?. En cada escena vemos como uno de los dos amados abraza a Charlotte, sin que nosotros sepamos en primera instancia si es Robert o Pierre. Mientras Pierre disfruta del pasado, recordando cuando se conocieron, su infancia, los besos dados a Charlotte le importa el momento, la pasión y el presente... cuando los caminos parecen tan distintos uno no explica como pueden seguir juntos, como si fueran los hijos la única razón por la que uno tiene que seguir pegado a la pareja, muchos son capaces de perder la dignidad, el amor propio y la vida.

El amante es paciente y desea dejar de serlo, le encantaría ser el primero, el sabe que el cuerpo que ama está compartido por otra persona y sufre por eso, pero como está más preocupado del presente y en su imaginación sueña con ese futuro, que nunca llegará, en que los amantes se decidan a dejarlo todo el uno por el otro. En realidad somos más cobardes y creemos que viviremos mucho tiempo, sin darnos cuenta que la vida se nos pasa entre mentiras y engaños. Por muy consciente que se esté y por mucho que te lo digan todos, el amante sigue ahí en la sombra esperando que Charlotte siga como está, en una doble vida de esposa y mujer... como si las dos cosas fuesen distintas.

Saludos a todos.



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Une femme mariée en Wikipedia
4.- Trailer