VALS CON BASHIR

No ha sido un buen día este, mientras andaba en el cumpleaños de mi hermana en casa de mis padres, en un momento sentimos un estruendo y unas botellas que se quebraban, estaban asaltando a mi papá, entre toda la tensión lo miro y le veo toda la cabeza llena de sangre, vamos a la urgencia médica, mientras los carabineros van a la casa de mis papás a dejar la constancia... ¿qué más se puede hacer?... después le preguntaba a mi papá que había pasado y no recordaba bien que sucedió. Entonces todos empezamos a contar nuestras versiones, con lo que se comenzó a armarse su historia. El shock hace que se nublen los recuerdos fuertes... justo el día anterior había tenido la dura experiencia de ver el Vals con Bashir, una película que sólo la pueden ver los fuertes... aunque sea una animación... es una de las películas más fuertes que he visto en este último tiempo... ¿y porqué si es una animación? la respuesta puede ser en el buen trazado... o mejor dicho porque siempre se sabe que la historia es completamente real... incluso los nombres de los entrevistados de esta película o documental de una de las grandes vergüenzas de Israel en contra del Libano.

Es fuerte tanto así que unos amigos no pudieron verla del comienzo, porque salen unos perros furiosos caminando juntos... veintiseis para ser exactos... "es que fueron veintiseis los perros que maté en la guerra dice el amigo... y se me aparecen todas las noches en mis sueños bajo mi ventana". Es que lo que hicieron estuvo mal, ellos tenían diecinueve años y una juventud por delante llena de sueños... hasta ahí nada se sabía del horror... hasta que en medio de las canciones una bala atraviesa el cuello de su compañero en el blindado sin que nadie lo notara ya había muerto...

Así es la guerra y los testimonios parciales de los soldados iraelíes se hacen más coherentes al unir cada versión, entre el olvido y la culpa de la masacre aparece como un trazo de dibujo coloreado. Acá en el Libano de los ochenta las fuerzas israelíes esperaban dar una mano a Bashir Gemayel, el lider maronita que tuvo su oportunidad de tener el poder en El Libano, pero Bashir fue asesinado... y con él, el odio y la rabia comenzaron a correr por las venas.

Aunque los niños soldados del Tsahal no entendían mucho del conflicto y sólo caminaban por entre las metrallas, bajo las ordenes de Ariel Sharon se exigió llegar hasta Beirut. El 15 de septiembre de 1982 se masacró a los campos de refugiados palestinos de Sabra y Chatila, con más de 300 muertos... entre ellos mujeres y niños...
por supuesto ya no nos recordamos de esos días, algunos aún no nacían y otros prefieren ocultarla... de hecho el nombre de Sharon, vuelve y vuelve a salir en la historia de Israel.

La animación parece suavizar el horror, pero cuando se sabe que la historia es como se cuenta, que en este caso no se relata, si no más bien se trata de reconstruir es la memoria la actriz principal que lucha contra la represión, y el olvido represivo. Mientras las alucinaciones vuelven por cada niño asesinado, por cada madre muerta, por cada sueño de libertad trunco por un capricho y una negligencia... El mismo pueblo diezmado en los cuarenta, parecía amnésico en Beirut mientras la muerte en los campos de refugiados ahora se miraba desde el otro lado de la reja.
Pese a ello la película israelí es valiente, es honesta y es libre... Vals con Bashir no es una película de dibujos animados, tampoco un documental, es un testimonio fuerte de la lucha entre el olvido, el futuro real, el pasado creado y el futuro incierto.


Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en FIlmaffinity
3.- Página de la película
4.- Trailer