viernes, 20 de enero de 2012

EL ESPEJO

El aire que mueve mi cuerpo 
jamás te capturará. 
Has de saber ése es mi precio 
no hay aire tras los espejos. 
Por ti seré un espejo 
el mejor amigo viejo 
Seré esa distancia imposible de salvar. 
Seré una travesura una leve quemadura 
el amor escurrido mi mirada virtual. 
Seré esa bebida que en el vaso se olvida 
Seré lo relativo de tu risa el latido.
Por ti seré un espejo 
pues te tengo y te dejo 
te atrapo y te devuelvo 
al final
(Maurcio Redolés)


El ascensor del departamento en que vivo tiene los tres espejos más verdaderos, en ellos no tengo escapatoria y puedo ver como mi nuca se va despoblando, también miro mi espalda, mis orejas, también como el trabajo y las tristezas van marcando en las pupilas el tunel sin salida de lo que pasa y lo que se graba. Son once pisos en que los dígitos impares van por treinta segundos indicando que la multitudes de siluetas similares a mi se pierden en el infinito. Desde ahí cada día la compuerta metálica se abre enfrentándome a lo que viene, después en la tarde cuando regreso la compuerta se abre para volver a mirarme como diciendo ¿cómo te fue?.

Si la hipnósis pudiera cambiar las trancas, se podría empezar de nuevo muchas veces, o mejor aún superar de manera sobrenatural. Cada uno de nosotros está cubierto de lo que se sembró en nuestra infancia desde ver a mi madre esperar por mi padre todos los días mientras él estaba en el norte, hasta los días en que comenzaba a comprender que habían silencios y respuestas a preguntas que no me había hecho y habían preguntas con respuestas que eran silenciosas. En la infancia los tiempos son distintos, y esos recuerdos que parecen sacados entre los sueños y las primeras concepciones temporales, van llevando consigo un tren de imágenes inconexas que al verlas en su conjunto van pegando ojos, narices y extremidades de lo que hemos ido siendo en cada etapa de nuestra vida, por lo mismo comprendí a María (Margarita Terekhova) cuando se sentaba a mirar el prado esperando el momento en que llegara el esposo, Alexei (Filipp Yankovsky) era un niño en esos campos, que recuerdan las conversaciones de su madre con un doctor sobre Chejov.

Yo por muchos años pensé que podía levitar, lo hacía porque al dar un paso me podía mantener el aire hasta dar el otro, lo entendía como algo normal, hasta que un día descubri que sólo lo podía hacer en los sueños. La confusión entre lo que podía hacer y quien era al despertar me iba llenando de colores que se vuelven tangibles, como si existiera una lógica entre el momento y la necesidad. El Espejo es el reflejo de lo que la niñez contiene y lo que los padres regalan. Por lo mismo cuando dejamos de ser niños nos vamos secando por dentro hasta dejar las sonrisas perdidas en la desesperanza del ruidoso silencio. No sabemos si es Alexei o Ignar, si fue antes o si es ahora y el ser se mezcla con las imágenes que un español que arrancó de las garras de Franco cuenta, o de como comenzó a caer el nazismo o como los chinos se volvieron fanáticos de Mao y la bomba atómica volvía al mundo en un mundo más frágil.

Se hicieron convenciones para explicar el significado de El Espejo, algunos la odiaron porque no se "trataba de nada", otros la han creido una muestra del un cine snob, ambicioso y en la búsqueda de respuestas filosóficos, simplemente la visión de quienes hemos sido niños, hemos ido comprendiendo que el fuego del incendio, el miedo de cambiarle una "t" a "r" a Stalin lo hacía pasar de un hombre de acero a un cagón con todo el miedo que eso significaba para un tiempo represivo, los días de hambre y de hombres valientes, de la casa en el campo, de la defensa de lo que se enseñó como patria... así el niño y el hijo parecen ser lo mismo, y la madre y la abuela parecen convertir la historia en un ciclo de eslabones que se enlazan para resistir y conducir los avatares del desgaste, la humedad del taiga y la soñada cordura pueden hacer del ser niño en nuestros días vertiginosos. Por ahora me quedo con lo que mi rostro cansado muestra, con esa imagen de mi madre esperando el regreso de mi padre, con el frío de Santiago y la cordillera como el eterno fondo de un lugar inmenso. Me quedo con la idea de decir sin miedo que sigo orgulloso de vivir lo que viví y de ser testigo de lo que pasó. Los espejos de mi ascensor lo comprenden y tratan de actuar de la manera más generosa cada mañana para decirme que esa imagen de infancia aún sigue viva entre esos ojos que parecen conducir por túneles inciertos que el paso del tiempo lleva.

Saludos a todos.








Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Zerkalo en Wikipedia
4.- Escenas

domingo, 15 de enero de 2012

SOLARIS

Una fanfarria con luces de oro indican que la Twenthieth CenturyFox es la empresa... luego unas letras verdes indican a Lucasfilm... y luego los bronces de John Williams saltan en un campo estrellado con unas letras amarillas que se pierden en el fondo del universo y un crucero imperial me estremecen los sentidos cada vez que un nuevo episodio de Star Wars comienza... Ese es mi universo el mismo que comenzaba con la música de Richard Strauss en "Así habló Zaratustra" en "El amanacer del hombre" de 2001... el tiempo y la vida no me permitieron verla en el cine... pero cada vez que puedo coloco la escena de la llegada del vuelo a la Estación espacial con el Danubio Azul para impresionarme con la grandeza de las escenas... esos son mis universos... el resto es sólo Carl Sagan y el Cosmos... que en esos años ochenta vi y leí sorprendido de la majestuosidad y de lo infimo que somos dentro del universo... bastaron esas tres cosas para comprender que era parte de algo que iba más allá de lo creado, que estos mecanismos tienen un sentido especial que los mueven... ¿la gravedad? las grandes fuerzas de lo desconocido... no lo se... pero el universo es inmenso y los efectos especiales de Lucas, Kubrick y el relato de Sagan eran tan grandes como el sonido de Williams, Strauss y Vangelis...
Pero el tiempo hace que lo que en un momento sea importante después sea ínfimo, que lo urgente sea una anécdota y que el Universo cambie... y eso ha hecho la vida en mi... y lo ha hecho Andrei Tarkovsky con mi visión del Universo. El director soviético una vez más me resfregó en la cara todo lo que entendía o que creía, y lo más increíble es que lo hizo con los elementos más simples de sus relatos... no necesité grandes fanfarrias imperiales, ni los vals decimonónicos... ni tampoco esos sonidos computarizados redentores de Vangelis simplemente el sonido del agua correr en un estero, el canto de los pájaros, un hombre mirando la belleza de un mundo interior y una banda sonora casi imperceptible me bastaron para comprender que las estrellas estaban más cerca de lo que yo creía y el infinito es tangible y me susurra al oido mi propia inmortalidad.

No reniego de la grandeza de lo visto en mis otras galaxias , solamente he incorporado en el universo el cosmos interior de cada ser humano. Kris Kelvin (Donatas Banionis) es un científico que es enviado a una misión a la Estación Solaris... porque algo pasa en el despoblado lugar, un científico ha muerto y la estación ubicada en el el oceano del planeta homónimo se encuentra casi en ruinas. Sacar de su campo tranquilo, de sus flores y de la pena que la nostalgia envuelve, es un desafío para para Kelvin en esta nueva hora en que tiene que partir a la estación.

Los científicos residentes Snaut (Jüri Järvet) y Sartorius (Anatoli Solonitsyn) que aún residen practicamente viven en sus nuevas cavernas dentro de la misma estación, se han convertido en ermitaños de un mundo extraño, en que las ventanas muestran universos desconocidos, un océano lleno de interrogantes del que aparecen los sucesos más extraños que se conozcan... a los que Kelvin, en un comienzo, se muestra esceptico pese a la locura real de su tripulación.

En medio del sueño de Kris una mujer aparece en la estación, un fantasma que tiene carne y hueso, tan real que habla y toca, es identico a Hari (Natalya Bondarchuk) su esposa muerta o bien es un sueño del que no se puede despertar, en Solaris no se entiende que es lo real y cuales son los sueños, el océano misterioso parece materializar las mentes en el momento de la entrega al descanso. Hari ha regresado como si fuese un replicante, sin pasado ni futuro ha sido creada en los recuerdos de Kris, y materializada en el planeta, ella es real, tan real como las cosas que amamos... es decir como nosotros las vemos... con ese color que alumbra el entorno de las cosas que consideramos bellas. Solaris es una lucha por la racionalidad y la realidad, ambas cosas no necesariamente son lo mismo... aunque el regreso de Hari solo sea la recreación de un maniquí, una pizca de felicidad de sentir que el amor perdura, es como una oportunidad para volver a besar. No hay más proyección, sólo volver a la conciencia de lo vivido. Estar en el presente y creer que lo que tenemos es en realidad nuestro.
En el cosmos de Tarkovsky las cosas tienen otros significados, el agua es una de las actrices principales desde los grandes océanos hasta el vapor, es ella quien canta, es ella la que hace crecer, como esos ríos congelados de la taiga siberiana, el agua que limpia, las nieves como si fuesen un cuadro de Brueghel, Solaris es casi una pintura actuada porque en medio de la lentitud de cada escena se distinguen uno y otro detalle del fresco, donde el árbol el caballo, la casa son quasares, galaxias y planetas de nuestro propio cosmos que esculpimos con cada sueño que llevamos en nuestro interior.

Saludos a todos.
(Publicado el 24 de Mayo del 2009)

Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Solaris en Wikipedia
4.- Trailer

5.- Algo de la banda sonora de Eduard Artemiev

6.- Fotogramas


7.- Sobre la música y los sonidos de Solaris (pdf)
8.- Solaris en La linterna mágica
9.- Solaris en Alohacriticón
10.- Solaris, la conciencia y la poética (pdf)

martes, 10 de enero de 2012

ANDREI RUBLEV


Paso por un pueblo muerto
Se me nubla el corazon
Aunque donde habita gente
La muerte es mucho mayor
Enterraron la justicia,
Enterraron la razón,
Y arriba quemando el sol.
 (Violeta Parra)

El artista, el bueno, siempre ha llevado consigo su historia, es protagonista y testigo del momento en que vive, se compromete e incluso es capaz de morir por lo que crea. En ese sentido Violeta Parra en Chile fue clave a la hora de abrir los ojos a las injusticias que vio y que aún siguen presentes. Ser testigo es una oportunidad que nos regala la historia para poder hacernos parte de ella, desde la forma más burda (votando) hasta la más comprometida que es luchando para que lo que no nos parece se convierta en lo que queremos que sea. ¿De qué sirve ocupar espacio en el planeta, si no se ha hecho nada para que las cosas sean mejores?, no se trata sólo de dejar hijos, más bien es crear conciencia de que debemos caminar hacia ser más libres, más justos y más fraternos.


Hay éxitos momentáneos, Yefim (Nikolay Glazkov) lo supo después de su viaje en globo, calentó aire y lo logró, pudo ver desde los aires lo que nunca nadie había podido ver en la Rusia del siglo XV aunque su aterrizaje fue mortal, la vida pudo más que la muerte. Así como si fuera una historia distinta tiempo después la lluvia, hace que lleguen a un refugio tres sacerodotes Danil (Nikolai Grinko), Cirill (Ivan Lapikov) y Andrei Rublev (Anatoli Solonitsyn) al entrar se encuentran con un bufón que se burla del Estado y de la iglesia, hasta que en algún momento los soldados "dateados" por Cirill, llegan a buscar al rebelde comediante que ha dejado en verguenza a los boyardos. Tiempo más tarde Cirill se encuentra con Teófanes el Griego (Nikolai Sergeyev) con quien después de una conversación le pide que lo mande a buscar al monasterio para que le acompañe a pintar íconos en Moscú.

Pero un día nevado llega desde Moscú una solicitud del propio Teófanes el Griego, solicita que un monje lo acompañe en la pintura de sus íconos y para celos de Ciril, el joven Andrei ha sido el elegido para que le acompañe en la nueva tarea de pintar el mundo cristiano en una época en que las transformaciones comienzan a volverse parte del cotidiano. En la antesala del paganismo, Andrei comienza a ser parte de la nueva Rusia que se avecinaba, el cuerpo desnudo, el fuego en el agua, el barro y los apntanos son elementos que se van esculpiendo de forma distinta, no hay similitud en el Nazarín de Buñuel, y la pasión está cerca y el infierno y el castigo son elementos que le incomodan al pintor. El vasto territorio ruso lleno de fríos y soledades se convierte en un muro entre la Europa renacentista y el mundo mongól que toma pista libre para que lleguen los tártaros hasta occidente y con ellos la verdadera muerte de lo que se conocía. La invasión está llena de traiciones, de los mismos príncipes rusos mientras Andrei es testigo de la muerte en Vladimir a manos de los tártaros... tanta muerte le roba la palabra al pintor por lo que decide hacer un voto de silencio.

Pero hay que volver a salir adelante y tener fe, han muerto tantos, pero pese a los ojos rasgados de los nuevos jefes, hay una necesidad de empezar de nuevo, el barro y el fuego siguen presentes y en el aire el polen anuncia cambios, no importa quien llegue Rusia seguirá siendo cristiana, seguirá teniendo fe y se pondrá en pie de nuevo. Andrei es testigo nuevamente de como el simple pero inmendo ideal de reconstruir la campana se convierte en un desafío total, no sólo para el joven Boriska (Nikolai Burlyayev) hijo del herrero que fabricó las anteriores también para todo un pueblo diezmado.

El mundo de Andrei Rublev que Tarkovsky plasmó en la monocromática historia, parece no cumplir más que con ciertos episodios aislados de lo que le tocó vivir, pero en el contextode una Union Soviética que pone al cineasta como testigo de otra sociedad que vivía en torno a una idea de mundo que desconfiaba de otras ideas. Andrei Rublev ahora en colores habla por las miradas que sus íconos muestran, desde la Santísima Trinidad y la inmortalidad de sus murales sagrados esparcidos por Rusia hacen que el monje que vivió en carne propia la sangre, el hambre y la muerte hicieran de lo divino un lugar en que el talento sobrepasó el color de los muros y se convirtió en un mensaje que grita, seguimos acá tan rusos como siempre, poniéndonos de pie nuevamente... esa es la idea.

Saludos a todos.




Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Andrey Rublyov en Wikipedia
4.- Escenas

jueves, 5 de enero de 2012

LA INFANCIA DE IVAN



Ayer vi a un niño jugando
a que mataba a otro niño
Hay niños que se parecen
a los hombres trabajando
(Daniel Viglietti)

Me tocó ver en un supermercado el llanto de un niño de como cuatro años que no encontraba a su madre, creo que es uno de las cosas más desgarradoras que el ingrato cotidiano te entrega. Al llegar a la casa de una amiga y ver que su hijito de un año lloraba intuímos que tenía sed, nos comenzamos a acordar del caso del niño que quedó sólo porque su madre había muerto en la calle, lo vulnerables de los niños y lo dependiente que nos volvemos de como estamos con ellos, junto con ese amor incondicional que cambia la vida para siempre hace que para uno sea imposible creer que exista gente que los abandone, que los haga sentir estorbos y que no se preocupen de ellos. A pesar de no ser padre aún me conmueve el mundo de los niños, tal vez porque nunca lo he abandonado, aún recuerdo una conversación en un gran patio en el que se guardaban camiones y una de mis amigas, nos recuerda que aún somos niños, cuando teníamos quince años y la Guerra del Golfo se mostraba por la televisión como si fueran los fuegos artificiales de año nuevo.
Ivan Bondariev (Nikolay Burlyaev) está feliz en la playa, es un día soleado en que el mar besa las costas soviéticas con esa efímera calidez del verano, mientras su madre camina por los bosques y los blancos dientes que la sonrisa delatan esos hermosos momentos que hacen que la vida valga la pena, hasta que una ráfaga de ametralladoras le recuerda al pequeño niño que la vida ahora es distinta, lo único importante es arrancar de la muerte que el avance hitleriano de la Wehrmacht ha provocado en los campos de la Unión Soviética, la guadaña acechante le ha hecho cruzar un gélido río para llegar a la costa amiga.


Es que la guerra transforma las cosas, y el niño capturado por las fuerzas soviéticas tiene un aire soberbio y entre palabras que no deberían salir de un pequeño de doce años, el teniente Galtsev (Yevgeni Zharikov) escucha atónito que el pequeño Ivan quiere comunicarse con el alto mando del Ejército Rojo, el mensaje es "tengo a Bondariev"... Galtsev incrédulo accede a la petición del infante. Mientras al otro lado del teléfono el capitán Kolin (Valentin Zubkov) también está atónito, no por lo insólito de la llamada si no porque sea cierto que Bondariev se salvó del peligro y sobrevivió a las masacres, los campos de concentración y está dispuesto a contar que pasa al otro lado del río Dnieper. Así Iván, como tantos niños soviéticos que quedaron huérfanos en las masacres que el ejército nazi esparció, dejó a los huérfanos en los campos de batalla para que apoyaran al ejército rojo.

Con una mirada severa y con facciones que muestran en su cara que la infancia sólo se posa en los sueños, al despertar vuelve a convertirse en un adulto vengativo que desea con todas sus fuerzas la derrota del enemigo. Las ciénagas de uno u otro lado del río son la vida y la muerte, el agua y el barro que los inmensos ríos rusos avanzan silenciosos. En la amputación de las ilusiones la infancia para algunos se va más rápida, para una persona como yo que aún posee una alto porcentaje de niño, ver que la infancia de Iván se convirtió no sólo en un breve recuerdo claro de su hermana comiendo manzanas en un camión mientras la abundancia hacía que poco importara que ahora comer es una segunda prioridad, después de vencer.

La filmografía profesional de Tarkovsky sólo tiene siete películas, pero en cada una tiene una galaxia de imágenes entrañable, besos en trincheras, momentos oníricos, íconos, poemas y como actriz principal a la belleza, cada fotograma se podría tomar y colgar como pieza de museo, porque abarcó lo que su imagnación convirtió en imagen, todo en Tarkovsky es poético, es color es inolvidable... y por lo mismo este mes será dedicado a revisar, ver y re-ver el cine de éste inolvidable director que convirtió al cine en una instancia de reflexión de la grandezas que la conciencia humana puede crear... o destruir

Saludos a todos.



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.-Comentarios en Filmaffinity
3.- Ivanovo detstvo en Wikipedia
4.-Trailer

viernes, 30 de diciembre de 2011

EL NIÑO DE LA BICICLETA



¿Qué necesita un ser humano
para apartarse de sí?
¿A qué distancia está mi mano
de la gente que conocí?
¿Qué le ha faltado a la verdad
para quererla disfrazar?
¿Por qué un bufón llena el lugar
donde hubo un sitio para amar?
¿Por qué fingimos confusión
hasta acabar con la razón?
En fin, no sé cómo decir
que todo ha vuelto a ser normal,
sólo si sé que no eres ya
lo que quisiste ser.
 (Silvio Rodríguez)

Son varios los amigos que sus padres son seres mitológicos que se vuelven una imagen vaga de un pasado lejano, no les interesa conocerlos porque ya les basta con cargar con el apellido de alguien que no les tendió una mano cuando necesitaron de unos hombros que lo soportaran cuando querían mirar más alto. Ahora que el tiempo se ha encargado de hacernos más viejos la mirada de ese señor que no estuvo se vuelve un examen de conciencia de ese daño que muchas veces son capaces de causar las decisiones tontas o precipitadas que nuestra inmadurez nos dio. En cada momento comprendo la influencia que tienen nuestros padres en lo que somos, en las decisiones que tomamos, y en lo que queremos ser.


Cyril Catoul (Thomas Doret) no lo puede creer, por más que llama a la casa de su padre, que antes era su hogar, nadie le contesta... el sabe que va a estar sólo un instante mientras el padre busca trabajo de ahí volver a estar juntos... pero algo raro pasa que la semana se convirtió en más tiempo que el necesario. Como si el olvido se convirtiera en ausencia todo comenzó a ser más confuso. En un primer momento el teléfono lo contesta un mensaje, en segundo lugar la casa está abandonada y del pasado de Cyril ya no queda nada, ni siquiera su bicicleta.
Una mujer que ve conmovida como el niño descubre que está solo ahora, en un orfanato se conmueve y comienza a buscar la verdadera bicicleta con buen resultado... ¿me puedo quedar contigo los findes de semanas?, le pregunta Cyril a Samantha (Cécile De France) después de que ella le entrega la bicicleta. Desde ese momento ambos comienzan a buscar los rastros de Guy Catoul (Jérémie Renier) el padre de Cyril que quiere hacer una nueva vida, dejando atrás el pasado, ahora con una nueva pareja hay cosas que ya no las quiere tener cerca, entre ellas... a Cyril... según él no tiene dinero para mantenerlo, cuando lo tenga podrá tenerlo de nuevo en casa.

Es en ese momento en que la vida de Cyril se vuelve sinuosa y vulnerable, Samantha lo sabe y está empecinada en quererlo y cuidarlo, pero los hermanos Dardenne como siempre se encargarán de mostrarnos lo dura que puede ser la vida que construimos con las decisiones que tomamos. Mientras miraba pensaba en todos esos señores ausentes de la vida de mis amigos, que andan por ahí olvidando eso que sembraron y de lo que no quisieron hacerse cargo, ahora deben estar viejos por ahí vagando o con una vida nueva... ¿cuando se acuestan pensarán donde estarán los hijos que no vieron?...

Ahora once de enero puedo dar por terminado el año 2011, con esta última historia de un año que estuvo dedicado a otras miradas desde otros colores de piel a veces oscuros como los de Lee, o muy claros como los de los nórdicos, el ojo rasgado por Buñuel o el dolor intenso de un Chile adolorido de la historia y un continente lleno de historias que nos sueñan desconocidas, la violencia bella de Kitano y la sencillez de Casavetes. No se si fue un buen o un mal año, trato de no hacer balances... el tiempo lo dirá... pero los momentos que el cine regaló este año dan la pasada para creer que se puede hacer un 2012 de vidas en 35 milímetros... espero que me acompañen por este nuevo viaje.

Que tengan un gran 2012
Saludos a todos



 Bonus Tracks
4.- Trailer




sábado, 24 de diciembre de 2011

MELANCOLÍA


El fin de siglo trae la sien 
cebada de podredumbre, 
como invitándome a una lumbre 
que prenderá quien ame bien. 
Bendito el tiempo que me dio 
una canción sin permiso. 
Bendito sea el paraíso algo infernal 
que me parió.
(Silvio Rodríguez)

Siempre hay una sensación de fin del mundo, lo escucho todos los días al caminar por el Paseo Ahumada, en cada predicador que grita las viejas malas nuevas del Apocalipsis, junto con ello me ofrecen la oportunidad de arrpentirme, de todo el daño que he hecho, de todo lo que maté y que hice sufrir. Dios me perdonará y podré entrar bien al nuevo lugar en que estaran todos los que comprendieron la salvación. Ahora que el 2011 termina lleno de recuentos, exámenes de conciencia y algunas desilusiones, el 2012 se viene lleno de sueños y deseos de que "Ahora si" que las cosas serán mejores... en medio de los deseos... ahora desde Yucatán los augurios del final parecen tener eco en algunos indicando el fin de otra era.
Los caminos son pequeños y no permiten que cualquier auto por muy lujoso que sea pueda circular por los sencillos senderos que llevan a las ilusiones del matrimonio de Justine (Kirsten Dunst) con Michael (Alexander Skarsgård). Todos los invitados ya están en la casona, pero dos horas después han llegado los novios, para la hermana Claire (Charlotte Gainsbourg) y su esposo John (Kiefer Sutherland), quienes practicamente ofician de anfitriones están desesperados porque la fiesta se está hundiendo, nadie entiende bien por qué Justine decidió casarse, estaba enamorada, pero a lo mejor las presiones de su jefe y padre del novio han hecho que ella tome una decisión, o a lo mejor la propia presión de la sociedad que tantas veces obliga a muchos a forzar los destinos de otros hace que la hermosa fiesta de matrimonio con el poco tiempo se convierta en una tragedia... En el caso de Justine estamos viendo como los astros se están modificando para avisar que las cosas cambiarán. Gaby (Charlotte Rampling ), la madre de Justine le previene en plena fiesta que las decisiones precipitadas son siempre malas decisiones y las demasiado pensadas también, el mundo de Justine está destruyéndose en cada instante.

Pero su hermana Claire, también irá viendo como su mundo comienza a destruirse por completo, ahora no por los caprichos o por las decisiones, más bien porque ha entendido que el verdadero fin de todo está comenzando, Justine cuando miraba al cielo se asustaba de la ausencia de Antares en la constelación de Escorpión, Ahora la cosa era más grave al ver que lentamente viene Melancholia en el cielo. No esa melancolía que a uno le invade en los días previos al año nuevo, que nos obliga a recordar todos esos momentos inolvidables que el año nos deja. En este caso la que viene es un planeta que ya pasó cerca de Mercurio y Venus sin grandes peligros, pero que con la Tierra parece que no se podría decir lo mismo. Por más que John le diga que el planeta lentamente se irá alejando, el terror del fin en vez de aliviar a Claire, la desespera por lo que se viene... como si viniera algo.

 Grandes y pequeñas cosas parecen ir destruyendo las ilusiones de ambas hermanas, el legado de amargura de su madre, la soledad y la incomprensión son capaces de hacer que el cielo se venga a abajo, por mucho que finjamos que ponemos las mejores intenciones en globos luminosos de papel que se elevan en el cielo nocturno, cuando no queda esperanza la oscuridad envuelve lo poco que se va diluyendo en lo invisible
En siete minutos iniciales Lars Von Trier muestra los últimas momentos que conocemos de lo existido, entre sombras diversas y movimientos de alta definición, uno ya sabe que se encuentra viendo una de las películas inolvidables de la vida. Es cierto será marginada por los comentarios que el director hizo en Cannes, pero aún así perdurará en la memoria de quienes la vimos y su mayor premio será el infinito.

Saludos a todos.




Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Melancholia en Wikipedia
4.- Trailer

jueves, 22 de diciembre de 2011

TILAI

En Comala comprendí
que al lugar donde has sido feliz
no debieras tratar de volver.
(Joaquín Sabina)

Lo sé pero lo repito, muchas veces asocio lo que viví con los lugares, como si esa fuese una condición fundamental para revivir los sentimientos, por mi deformación profesional a veces lo logro, pero una vez no es distinta a la otra y a veces la palabra regresar tiene una alta dosis de ilusión  y otra de realidad... al volver el sueño se convierte en piedra y las cosas comienzan a ser diferentes, no iguales a como eran, esos hermosos parajes y lugares no fueron iguales ahora ni antes, las vacaciones no son las mismas entre un año y otro, por mucho que sea el mismo lugar, las olas que revientan en las rocas lanzan otra espuma y los mordiscos que el agua da en la arena han cambiado la forma de ese espacio en que nuestros pasos se marcaron en la orilla. Pero así todo no importa, siempre me gusta volver, a veces me arrepiento del porqué lo hice, pero al final creo que los amores superan a las penas y ahí comprendo nuevamente que eso que nos trae de regreso tiene una alta dosis de amor ... tal vez por lo mismo muchos buscamos en el hogar de nuestros padres ese abrazo que nos faltó alguna vez.

Saga (Rasmane Ouedraogo) ha decidido regresar al pueblo, dos años son mucho tiempo para dejar promesas de amor y de futuro, algunos por más que vivan siempre en otro lugar, llaman "casa" al lugar en que habita su corazón. Al acercarse el recibimiento lo hace su hermano Kugri (Assane Ouedraogo) que le cuenta cual es la realidad de su ausencia, en primer lugar su prometida Nogma (Ina Cissé) se ha casado, ahora es la segunda esposa de su padre. Por lo cual su propia novia se convierte en su madrastra. Saga no alcanza a entrar al pueblo cuando ya las noticias son terribles... y por lo mismo es enviado a vivir fuera de los límites del pueblo.

Pero Nogma aún sigue enamorada de Saga, por lo que ambos comienzan a verse a escondidas, hasta que son descubiertos, razón por la cual el pueblo dictamina que se debe asesinar a Saga por el delito de incesto... el encargado de matarlo es Kugri, su hermano. Parece que Saga se trajo consigo una maldición al volver a su ciudad natal, pero Kugri no es capaz de asesinar a su hermano querido y le pide que se vaya... pero ¿era mejor regresar? o quedarse esperando que el olvido dejara a Nogma en el pueblo en brazos de otro. No creo que Saga se arrepintiera de que sus pies lo trajeran de vuelta, Nogma aún lo ama y el saber que los sentimientos siguen vigentes ya es un gran motivo para entender que el viaje valía la pena. Que importaba el sol, la sed y la fría noche... ¿es más que importa que el padre se case con su novia?, si al volver descubre que aún había una persona que está feliz de su reencuentro. Saga se comió el orgullo y prefirió estar bien, con todo lo que eso significa, con el dolor, la incomprensión y la envidia de algunos... lo importante es que luchó y a vuelto a crear otra historia.
Por eso me gusta volver... y que algunas personas vuelvan.

Saludos a todos.

Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Tilaï en Wikipedia
4.- Trailer

lunes, 19 de diciembre de 2011

ESTRELLAS EN LA TIERRA

 El niño busca su voz.
(La tenía el rey de los grillos.)
En una gota de agua
buscaba su voz el niño.
No la quiero para hablar;
me haré con ella un anillo
que llevará mi silencio
en su dedo pequeñito.

En una gota de agua
buscaba su voz el niño.

(La voz cautiva, a lo lejos,
se ponía un traje de grillo.)

 Vicente Huidobro

El momento de la piñata en los cumpleaños, es la mejor premonición de lo que pasará en la vida, cada uno de los niños va mostrando su faceta cuando se trata de agarrar dulces, están los competitivos que quieren a toda costa tomar todos los dulces, los que comparten lo que tienen con el resto y los que no pueden encontrar... entre otros grupos. Algunos andan en su mundo en sus cosas inventando sus propias historias como si el planeta se moviera en cámara lenta y el mundo girara para ellos. El tiempo es algo que inventamos y que se nos reveló en nuestra contra, desde ahí nos hemos dedicado a apresurar los procesos, el dinero, la riqueza, la producción y la vida. Todo tan rápido que se nos olvidaron los colores, los aromas y la belleza... al menos para la gran mayoría.

Ishaan Awasthi (Darsheel Safary) vive en las nubes, sus notas son un desastre y su capacidad de desconcentración es máxima, no puede hacer mucho en el colegio, porque siempre está preocupado de los detalles, tanto así que sus profesores lo tienen marcado en el peor de los rangos, por sus baja atención en clases y su dificultad para integrarse en la clase, las ventanas son sus peores compañías desde ellas puede quedarse horas mirando una poza o en pleno examen quedarse imaginando que es un capitán galáctico, todo le rebala a Ishaan, ni los padres lo entienden, ha tenido todo en la vida, algo que en algunos lugares de la India no es tan fácil, pero así todo no hay caso, su mirada perdida lo vuelve casi un autista de la clase... la imaginación es tan intensa que puede pasar cualquier cosa.

El problema es que tanto andar en las nubes no sirve para cumplir las expectativas que la sociedad espera de uno. Con esa mirada perida el niño se va volviendo más rebelde, por lo que sus padres deciden enviarlo a un internado para que se reforme. Pese a las lágrimas y los "nunca más", el niño va perdiendo su auto estima y su entusiasmo por lo que le rodea. Así todo sigue triste cada día encerrado en su mundo imaginario El problema es que en el internado el niño tiene una actitud, cada vez más autista, por lo que la incomprensión se acentúa, hasta que Ram Shankar Nikumbhun (Aamir Khan) el profesor de artes plásticas reconoce lo que tiene, dislexia y de ahí se gatilla la necesidad de atender de manera especial al pequeño.

Es tan fácil destruir la vida de un niño, desde la incomprensión de los padres, la competición y los deseos de que todos sean buenos para lo que creen que es lo importante, la vida de un niño se va volviendo en algo muy distinto a ese recuerdo feliz. La niñez es el umbral de lo que será el resto del tiempo e Ishaan comienza a descubrir los verdaderos colores que le liberan, las letras que forman palabras y las palabras que forman sueños, desde ahí el colegio va descubriendo a un niño distinto y un niño feliz. Un niño que parece perder su voz entre los gritos de la incomprensión de los adultos nos oblicga a aprender a comprender el tesoro que cada niño posee y hacerlo florecer.

Saludos a todos.

Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Taare Zameen Par en Wikipedia
4.- Página de la película
5.- Trailer

6.- Película completa (subt inglés)

viernes, 16 de diciembre de 2011

GET ON THE BUS

No es fácil tener tolerancia, lo veo con algo tan sencillo como los equipos de fútbol en Chile, yo soy hincha de la Universidad de Chile que tiene rivalidad con Colo colo, cuando ando en la calle y veo gente con la camiseta blanca del equipo rival, me provoca cierta inseguridad como si supieran que soy hincha del equipo contrario, me sorprendía en mi ese deseo de que no estuvieran cerca, sabía que es una estupidez de mi parte, pero esa extraña sensación de intolerancia se puede aplicar a otros grupos a los que no pertenezco... de verdad hago mi esfuerzo, pero creo que no conozco a nadie que sea completamente tolerante... entre política, religión, deporte cada uno va generando sus propias identidades, mientras algunas situaciones nos unen en el interior nuestras motivaciones personales nos van moviendo.
Louis Farrakhan Muhammad, decidió convocar en Washingtona la marcha del millón de hombres, donde la población afroamericana  de todo Estados Unidos sería convocada para octubre de 1995. La idea prende por todas las ciudades estadounidenses entre ellas Los Ángeles, de ellos un grupo de afroamericanos deciden partir en un bus hasta la marcha el viaje lo organiza George (Charles S. Dutton) y en el van subiendo Evan (Thomas Jefferson Byrd) y su hijo Evan Jr. (De'aundre Bonds) que se hace llamar "Smooth", ambos unidos por una cadena y unas esposas por una condena de 72 horas que el niño; también sube Jeremiah (Ossie Davis) un anciano que aún recuerda los días de los sesenta cuando el "Black Power" se hacía fuerte y levantaba los puños en México 68. También sube Gary Gary (Roger Guenveur Smith) un "café" hijo de madre blanca y padre negro que ahora trabaja de policía; Kyle (Isaiah Washington) con Randall (and Harry J. Lennix) una pareja gay que tambiéndecide marchar; Xavier (Hill Harper) un estudiante de cine de la UCLA que quiere hacer un documental de quienes van a la marcha; Flip (Andre Braugher) un pedante actor; Jamal (Gabriel Casseus)un ex pandillero que tras convertirse en Musulmán ahora trabaja en la rehabilitación de jóvenes. Jay (Bernie Mac) el dueño de una compañía de chicles y Mike (Steve White) que cree que toda esta reunión de negros es una excusa para exterminar a los afroamericanos.

Como vemos todos son afroamericanos, todos van a la marcha, pero son todos diferentes con historias tan distintas como las vidas que les ha tocado vivir. Así el bus se va convirtiendo en un pasaje por las verdaderas tolerancias contra los homosexuales, los problemas familiares, republicanos y demócratas, pandilleros y policías, entre cafés y negros así una a una, se van mostrando las complicaciones que tiene la convivencia en lo cotidiano, ser negro al final es parte de la piel, pero pese a la gran causa que convoca la nación, hay otros trabajo que también hay que realizar para unir las diferencias y el viaje se está encargando de enfrentarlos.


Spike Lee nos hace bien siempre, nos recuerda que la discriminación está en los elementos más mínimos, como las camisetas de fútbol, o en que las personas que trabajan haciendo aseo en un club de golf de Chile, se les obligue a usar uniformes para que se distingan de los que pagan por el club. Los hermanos afroamericanos se reunieron ese día en Washington, fue un éxito la presentación, para los que viajan en el bus también será una intensa experiencia que tiene otros beneficios y otras satisfacciones que no se esperan.
En lo inesperado siempre está el comienzo de las inflexiones que hacen que la vida sea maravillosa.

Saludos a todos.



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB 
2.- Comentarios en Filmaffinity
4.- Get on the Bus en Wikipedia
Trailer

miércoles, 14 de diciembre de 2011

EL MANANTIAL DE LA DONCELLA

 Hace unos días un conocido colocó en Google+ una publicación que decía que un estudio afirma que la gente inteligente es menos propensa a creer en Dios, la verdad por muy científico que sea, lo hizo como una provocación a los creyentes y siendo franco, como silogismo no sirve, porque también quien lo coloca no es creyente y tampoco es muy brillante (siendo diplomático para decirlo).
Creo que las discusiones entre creyentes y ateos no tienen cabida, son dos grupos que no se entienden, ni si quiera yo se donde puedo estar hay momentos en que tengo fe y otras en que no creo en nada.
El tiempo me ha ido mostrando que es mucho más fácil ser ateo que creyente... no sólo porque la sensación de vacío que nos deja el estar en el incomprendido momento de la formación de la vida, y del momento en que nuestra memoria fue utilizada para recordar cosas que permitieron crear y disfrutar de más cosas que lo que la necesidad de alimentarnos nos brindaba, no nos hemos podido conformar con esa coincidencia que nos tiene anclados al planeta... Dios ha sido nuestro inexplicable mundo oscuro, en él hemos depositado lo que anhelamos, nuestros miedos y nuestras gracias.

Por lo mismo en la Edad Media fue un mayor momento de crecimiento de la fe, mientras la vida y los caminos habían sido inundado por los miedos, la gran salvación de los hombres estaba en ser fieles. Por lo mismo las familias tenían que cumplir con los deberes sagrados que la iglesia colocaba. En esa instancia se encontraban Töre (Max Von Sidow)y Märeta (Birgitta Valberg) una familiar rural del medioevo, que tenía el deber de enviar a su joven y virginal hija Karin (Birgitta Pettersson) hasta la iglesia a dejar unos cirios como es el ritual ancestral, El mejor traje cocido por otras doncellas, el caballo preparado y la hermosa sonrisa de la joven. Con toda su inocencia y su despertar en un mismo viaje llena del orgullo de ser la elegida.

Para el camino le acompaña una sierva llamada Ingeri (Gunnel Lindblom) una mujer embarazada, que representa todo lo contrario de Karin, incluso aún le rinde culto a Odín. Ambas van camino a la iglesia, pero el bosque es peligroso e Ingeri prefiere dejar sóla por el camino a Karin. La joven sin miedo en el interior del bosque se encuentra con tres vagabundos que caminan por el sector. Con la candidez de su rostro decide comer con ellos sin pensar que en ese acto le espera otro destino, completamente distinto al que lo que creemos como bueno existe. Pero aunque algunos no lo entiendan la justicia parece existir, o al menos la tratamos de interpretar de formas que nos dejen tranquilo. La muerte de los asesinos para algunos es un consuelo, acabar con la rabia es más ràpido que terminar la pena. Generalmente la justicia ataca más a la ira que a la razón... tal vez uno de los problemas que actualmente creemos solucionar es el primero.



La muerte de quienes amamos en causas trágicas, muchas veces nos comienza a rebelar contra lo que creemos que es bueno. ¿Cómo se puede permitir Dios traer la muerte?, ¿cómo podemos entender lo que el destino nos coloca en cada momento?, como entender los signos que la casualidad nos deja cosechar, son preguntas que constantemente Bergman nos deja en su frugal historia. Siempre hemos tenido el don destructor de acabar con lo bello y lo justo. Mientras los ríos fluyen intentando limpiar nuestra duda, a inundar los vacíos que nos deja esta aparente soledad, esa extraña fe, que algunos llaman corazonada que hace que las cosas tomen vida y florezcan, así la muerte deja de convertirse en la aniquilación de lo vivo y se vuelve en el cambio de idioma, en polvo que se esparce por quienes estamos aún viviendo esperando una respuesta del motivo verdadero que nos puso en este lugar que por ahora sigo disfrutando.

Saludos a todos


Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Jungfrukällan en Wikipedia
4.- Primeras escenas

domingo, 11 de diciembre de 2011

KIDS RETURN



La hija de una amiga está triste porque ahora que pasa a primero tiene probabilidades de ser cambiada a otro curso, por lo que no podrá estar con su amiguita inseparable de kinder, nosotros le decíamos que no se preocupara porque igual vería a su amiguita en los recreos, además ahora tendrá oportunidad de conocer a otras personas que también serán amigos... la verdad no la convencimos mucho, pero a todos nos ha pasado que en algún momento nos tenemos que separar de nuestros amigos inseparables, incluso ahora en el trabajo tengo amigos que me daría pena dejarlos pero asumo que en algun momento nos separeremos. Es que los lazos se van volviendo más fuertes siempre y para personas que no somos tan amistosas cuando tenemos amigos los disfrutamos.

Pero los reencuentros con amigos también son buenos siempre,no importa el momento puede ser mañana como en veinte años más, no importa están llenos de amor y nostalgia, como el de Masaru (Ken Kaneko) con Shinji (Masanobu Andô) ahora adultos después de tantas cosas que pasaron, se han vuelto a ver... tal vez cuando eran jovenes no veían como algo cercano el momento en que el camino de ambos tomaría distintas bifurcaciones, pero la vida se encargó de alejarlos en la misma ciudad, pero con deseos distintos el paso de uno lentamente fue separando al otro.

Los noventa japoneses dueron duros entre el terremoto de Kobe y la crisis asiática la desilusión comienza a envolver a la nueva generación joven, el par de amigos siempre andaban juntos sin mucha atención a lo que el colegio enseñaba, a diferencia del tercer amigo Hiroshi (Michisuke Kashiwaya) que los miraba desde la ventana como uno llevaba al otro en bicicleta. Eran los tiempos del colegio en que los recuerdos de anecdotas parecen poblar los albumes de recuerdos, como los humoristas del Antartic 55, que podrían ser una analogía al propio Kitano y su duo Beat. Como una autobiografía los estudiantes van recordando cada una de las travesuras de jovenes... algunas no muy agradables, (quemar un auto no sólo es un acto de encapuchados), pero tratar de entrar a un cine porno, o beber invitado por un jefe yakuza son elementos que van marcando los deseos y las personalidades de la pareja de matones del colegio.

Una venganza de un golpeado por Masaru lo deja tirado en un pasillo con la boca llena de sangre, desde ese momento decide dedicarse al box, donde no le va tan bien como a su Shinji que sigue sus pasos hasta sin darse cuenta se convierte en un gran deportista. Mientras que el talento de matón de Masaru le abre las puertas con los yakuzas, Hiroshi por su parte siempre enamorado comienza a trabajar en un taxi para poder casarse con  Sachiko (Yûko Daike)... así sin ser catalogados de exitosos o fracasados el tiempo se encarga de separar las coordenadas en que cada uno nos movemos y los destinos a volverse más áridos. La muerte roza cerca y pese al alejamiento siempre está en el recuerdo el deseo de saber que es lo que están haciendo en algún lugar los amigos que dejamos, esos que pese a la distancia al vernos seguimos conversando como si hubiese sido ayer y como si mañana nos siguieramos viendo... esos son los verdaderos amigos.



 Bonus Tracks
1. - Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Kizzu ritân en Wikipedia
4.-Trailer

BIG TROUBLE

Ser de clase media es algo que parece ambiguo para algunos es no ser rico, pero tampoco ser pobre, para otros es ser una persona que trabaja y tiene la posibilidad de tener un buen suelo, lo que si está claro es que ser de clase media no es una situación simple y se puede pasar facilmente a la pobreza, de hecho es más común pasar a una situación peor que a una acomodada. En ese sentido me gusta el concepto usado y estigmatizado de proletarios, esas personas que su único capital eran sus hijos, como bocas que alimentar, pero posteriormente como mano de obra para ayudar en las labores del padre. Ahora no es tan común que en la clase media los hijos tengan los mismos oficios que los padres, pero tampoco es claro que los hijos profesionales sean más ricos que sus antecesores, las políticas sociales se han hecho más miserables y en cada minuto que pasa somos más esclavos del sistema económico de turno. Los hijos deberían tener un futuro más próspero, pero para la clase media son cosas difíciles desde meter al hijo en el jardín infantil hasta que entran a la universidad, es un sacrificio económico inmenso el que los padres hacen por ellos.

En el caso de Leonard Hoffman (Alan Arkin) tampoco es fácil, peor aún cuando tiene trillizos que salieron con el talento musical, son tan buenos músicos que fueron seleccionados en la prestigiosa Universidad de Yale, de hecho ya andan con los polerones que indican la casa de estudios, el problema es que la universidad no se caracteriza por su bajo precio, peor aún si son tres al mismo tiempo, hay que pagar alojamiento, matricula entre otras cosas que un vendendor de seguros por supuesto no puede sostener ni acá ni en Estados Unidos. En la desesperación llega hasta pedir influencias en sus altos jefes, que por supuesto les dicen que no... así las alternativas para tener algo de dinero para que sus hijos cumplan su sueño.
El problema es que para conseguirlo, algunos están dispuesto a todo como Blanche Rickey (Beverly D'Angelo) una espectacular rubia que desea pedir un seguro de vida para su esposo Steve (Peter Falk) y luego asesinarlo, de un modo tal que parezca un accidente. Para un corredor de seguros es un pésimo negocio que el asegurado muera luego, pero para las "víctimas" si lo es... así después del asesinato con una cuerda hay que hacer que parezc un accidente. Todo parece ir bien hasta que al ir a cobrar el seguro hay un señor demasiado parecido a Steve el asesinado solamente que está pelado con película, no hay que ser muy intelegente para darse cuenta de que el plan era más peligrosa de lo que se veía en el papel. De ahí en adelante viene todo el momento de que el seguro se le pague.

Algunos cuando hablan de Cassavetes el padre del cine independiente como lo conocemos no se atreven a mencionar Big Trouble como su última película, de hecho si dirección es algo que caracterizó a Cassavetes en este caso es un trabajo para su gran amigo Peter Falk, en esta comediase ve ese vulnerable mundo de las clases medias, algunas prefieren tratar de engañar al seguro, otras ir a concursos como "Quién quiere ser Millonario" o jugar a la lotería pero todos, todos con el fin de estar mejor.
Ojalá algún día nos sintamos así, sin necesariamente ser multimilloanrios.

Saludos a todos



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Big Trouble en Wikipedia
4.- Escenas