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lunes, 3 de septiembre de 2012

CRIMENES DEL FUTURO

Estas fechas fueron las del año del Lobo
Aquí estamos en este pozo ciego
Aquí fuimos entre tanta semilla quemada
Aquí nos arrojaron apresurados

No fue el cólera

No fue el sida
No fue el volcán Vesubio
No fue Hiroshima

Nadie dormía cuando nos eliminaron


Reconstruyen cuidadosos nuestras últimas pisadas

Las claves del miedo en estos (nuestros) cuerpos enterrados

Congreso

Cada cierto tiempo vemos las protestas en contra de las fábricas de cosméticos por sus experimentos con animales. Esos sacrificios que hacen otras especies para que nuestros cuerpos se vean más jóvenes sacrifican empíricamente a diversas especies en laboratorios con diversas combinaciones químicas. En ese ambiente es muy común ver en estos tiempos grandes cruzadas en contra del maltrato animal, el comer carne y la adopción de mascotas.

Pero en el niverso de Cronenberg todas esas protestar tienen sentido en especial en porque en el futuro, es decir en el año 1985, la especie humana vivirá momentos críticos, después de que una enfermedad se convirtieras en mortal para las mujeres después de la manipulación de cosméticos. Adrian Tripod (Ronald Mlodzik) está inserto en la Casa de la piel, un lugar de reposo donde doctores y pacientos vivían juntos. En un principio el mal de Rouge, es una enfermedad que afecta principalmente a mujeres, con el tiempo comienza a mutar para atacar a hombres. En ese ambiente solitario y silencioso Adrian se mueve casi como un doctor más. Pese al color negro de sus vestimentas y el encontrarse practicamente al margen de lo que curre en tiempos en que del género femenino sólo quedan algunos olores de las últimos ropajes que vivieron.

En un escenario mudo con algunos sonidos casi como una banda sonora, la lánguida voz en off va mostrando las situaciones que inundan el lugar, hasta el momento en que descubre que mantienen en forma clandestina a una mujer, una de las últimas sobrevivientes casi de cuatro años, los que habitan el lugar desean embarazarla, practicamente en una descarada pedofilia de los residentes... así el universo de Cronenberg vuelve a recurrir a lo que podríamos llamar su "proto- historia" pesea  a la precariedad junto con Stereo, poseen más elementos comunes que la hacen casi una película similar en dos partes... aunque ahora sin telepatía, la sociedad del futuro está pagando por todos los crímenes que aún ahora se siguen comentiendo, al utilizar otras especies para test de laboratorios que podrían llevarnos en algún futuro a mutaciones genéticas que lamentaríamos... El grito del cine de Cronenberg que en esos tiempos de principios de los setenta estaba comenzando a aprender ya tendría dos pies donde apoyarse entre Stereo y Crímenes del futuro.

Saludos a todos.


Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity

3.- Crimes of the future en Wikipedia
4.- Trailer

5.- Película completa

domingo, 2 de septiembre de 2012

STEREO

Para muchos hablar de David Cronenberg es sinónimo de algo retorcido, están en la mente cerebros que estallan, hombres con vaginas en sus estómagos, seres que se convierte en insectos, experimentos científicos que van entre la sicología y la sexualidad. Así como Ozu hablaba siempre de la familia, el mundo de Cronenberg pasó por años al lado de nuestros terrores más sobrenaturales. Es por eso que se hace interesante revisarlo en este mes, a través de sus películas emblemáticas para el cine para al mismo tiempo ir reconociendo su pensamiento, su modo de ver los miedos y su modo de mirar el cine.
Una de las grandes virtudes de su cine es la fidelidad tanto a su estilo como en su lenguaje, la mayor parte de su filmogrfía la ha realizado en Canadá, su cine es una ilustración del pensamiento más oscuro de los humanos, tal vez por lo mismo se ha ido descategorizando de lo que algunos llamaron cine gore, como el de Romero para pasar a su estilo particular.
Su infancia en Toronto, su aislamiento laico en un ambiente judío y la enfermedad degenerativa de su padre dicen que fue lo que más tarde inspiraría su nueva forma de narrar un mundo distinto, pero que en muchas ocasiones parece ser más cercano a la realidad de lo que se cree.


Un helicóptero aterriza cerca de un edificio moderno desde ahí baja un científico (Ronald Mlodzik) para conocer la Academia Canadiense para la Investigación Erótica, no se si existe algo así en Chile, hubiera sido interesante... pero porqué ir a un lugar así que se llega en ese medio de transporte. parece ser un centro aislado donde se están investigando nuevos avances científicos de la mente humana, principalmente relacionados con la telepatía como nuevo modo de comunicación, entendiendo ésta como un elemento liberador de las ideas que queremos expresar y que nuestras palabras parecen dejar prisioneras. Por lo cual practicamente toda la historia la conoceremos por el pensamiento de alguna persona, más que por palabras.

Puede ser que el día que nos podamos comunicar con el pensamiento a lo mejor seamos más sinceros, no se podrá mentir y se podrá pensar un te amo sin tantos rodeos, o un te deseo también. Esas son las preguntas que parece hacerse un joven Cronenberg en esta extraña historia. El experimento de telepatía se hace en forma empírica con una pareja que se le quita el habla extirpando su laringe para que desarrollen su poder mental. Una voz en off va relatando sus avances y sus dificultades. Así vamos conociendo los diversos resultados desde la dominación, la política, la familia, el sexo, y como se atrofian algunos elementos de la mente.
Es probable que si Cronenberg tomara de nuevo esta película la haría mucho mejor, pero si se quiere entender el origen de todo lo que se verá después es una de las aristas predictoras de todo lo que se vendrá en su cine... por ahora ya estamos inmersos en el mundo de David Cronenberg... disfrutémoslo.

Saludos a todos



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Stereo en Wikipedia
4.- Escenas

5.- El lugar donde se filmó Stereo

Ver mapa más grande

viernes, 23 de septiembre de 2011

CHILE, LA MEMORIA OBSTINADA


Volver a los sueños rendido por la ausencia, 
diferente, sin certezas por ver y sentir. 
Preciso no es fácil decir 
aquello que el silencio 
guarda como una fábula. 
Venir de tan lejos, vencible, 
con la marcha del tiempo en los hábitos, 
y en los labios la esperanza, la risa y nostalgia. 
No es con razones que puedo explicar 
lo distinto que estoy en la misma luz 
y es inquietante saber que las sombras 
cambiaron sus formas de acontecer. 
Nada se olvida porque hasta el final 
atado quedó en mi vida 
el espacio que se nombra mi país. 
Hace unos años mi mamá sufrió un atropello por un bus del Transantiago, afortunadamente ahora está bien, pero en esos momentos el impacto fue tan fuerte que no supo que le pasó, pese a que su rostro quedó desfigurado con grandes hematomas. Ahora después de un año y medio de ese maldito 22 de enero, ella aún no recuerda nada de los sucedido, fue tanto el golpe que su memoria olvidó por completo ese trágico momento.


Creo que a Chile le pasó lo mismo, sigue en el shock que hizo olvidar... (u omitir) lo que pasó. Si bien ya se podía decir Allende fuerte, y de mostrar lo que pasaba, pero saber que fue la Unidad Popular y quienes fueron sus responsables, ya sea de la izquierda o de la dera recha, ahora que están de vuelta hicieron funcionar la máquina del olvido. Por lo mismo Patricio Guzmán decide tomar nuevamente los rollos de La Batalla de Chile, que hasta los años noventa, nunca fue proyectada en algún cine de Chile. Otro reflejo del miedo y la autocensura reinante con la nueva democracia. La historia calificada como uno de los diez mejores documentales de esa década. El tío de Patricio Guzmán se arriesgó a guardar los rollos y la embajada de Suecia se encargó de sacarlos por valija diplomática, mientras Patricio estaba preso en el Estadio Nacional, los rollos viajaban hasta Estocolmo para el montaje.
Ahora veintitres años después del golpe militar, se hace necesario recuperar a esos personajes anónimos que estuvieron en la batalla, algunos se reconocen inmediatamente como los guardaespaldas de Allende, pero otros personajes ya no saben si son ellos o son otros... no sólo por lo que la película proyecta, también por lo que la vida hizo, todos los que estuvieron ya no son los mismo, en el fondo algunos tienen los mismos sueños, pero ahogados en el shock colectivo que vive Chile, nos disfrazamos de anónimos, el blanco y negro de la memoria se ha encargado de pintarnos el presente con otros colores. El tableteo de ametralladoras y las orugas de los tanques están alojadas en algún cuartel. Pero basta que un grupo de músicos entone una partitura de Venceremos por el Paseo Ahumada y se despierten sensaciones, algunos levantan el puño otros miran con cara de reprobación por lo que pasa... como si la nación de enemigos vuelva a reactivarse.


Mientras tanto los jóvenes que ven el documental van generando sus propias interpretaciones, mientras en un grupo de personas de derecha al ver el documental reclaman por el sesgo isquierdista que le dan. Lo mismo dicen algunas niñas en un colegio en que las opiniones divididas, mientras las lágrimas y el odio sale por los poros por lo que se hizo. Así Chile parece no haber aprendido mucho de todo lo que pasó en los últimos treinta años. La desigualdad que ha sido fruto de la obstinación de la memoria, es la que aún nos tiene asumidos en la separación entre ellos y nosotros. No sirve de mucho que el skyline de una ciudad ahora se vea más alto, con nuevos edificios con la cordillera de fondo, el maquillaje con el que hemos pintado un país que parece moderno, sigue lleno de cicatrices que a la primera lluvia nuevamente salen a flote para decirnos que estamos igual que siempre.


Saludos a todos


Fui desgarrado de todas las señas 
que hicieron mi llama y mi descubrir 
y es de un distante lugar 
que los años me envían 
los signos de mi entender. 
Y, sin embargo, yo sé que total 
sabré compartir un día 
el espacio que se nombra mi país.
Cambiaron las vidas en torno de la espera, 
simplemente, por anhelos de ser y vivir. 
¡Abrir la frontera es el fin, latir desde la tierra 
en canción pura y única! 
Presente y lejana la esencia del motivo, 
el comienzo, la memoria, 
la raíz de la luz y del amor. 
¡Es siempre frágil la constancia del volver, 
voz y lágrima!



Bonus Tracks
1.- Película en IMDB
2.- Comentarios en Filmaffinity
3.- Chile, la memoria obstinada en cinechile
4.- Película completa en Luciano Cruz videos
5.- Película en Youtube.

domingo, 29 de abril de 2007

EL VIOLIN ROJO

El valor de las cosas materiales, muchas veces trasciende las cosas, el comienzo del documental de Salvador Allende de Patricio Guzmán comienza, mostrando la mitad de los anteojos del ex-presidente de Chile... fueron celosamente guardados y cuando se recuperó la democracia reaparecieron. Así como ese cristal con marco negro destruido por la ametralladora suicida que ahora está perdida en la casa de algún militar que entró a La Moneda.
El violín rojo también es un objeto, valioso por si mismo y como tal trascendió de siglo en siglo hasta llegar al presente... Como las cosas de antes que ahora resurgen, en algún momento despreciamos lo viejo y ahora buscamos por todos lados esos objetos de culto, como los televisores Antu o esos IRT, o los chanchitos juanitos de plástico. No porque sean viejos, si no porque acercan la felicidad, son esas cosas que forman parte de la escenografía de nuestros recuerdos...
El violín rojo, fue hecho en Cremona, en plena Italia del siglo XVII para ser grandioso por el luthier Nicolo Bussotti a su hijo que estaba por nacer, pero que el destino truncó al igual que la vida de su madre.
Las cartas del Tarot de Marsella van anunciando el destino de los que poseen el violín, desde el huerfano Kaspar Weiss en Viena a finales del siglo XVIII, pasando por unos gitanos, para llegar a manos del intérprete libertino (como diría un pechoño)Frederick Pope en Oxford, y luego, en pleno siglo XX a Shanghai donde reaparece en plena revolución cultural de Mao de la manos de Xiang Pei... para llegar del anonimato a un remate en Montreal.

¿Qué tiene el Violín rojo, que lo hace tan famoso?, un sonido maravilloso… una hechura perfecta, un mito y el recuerdo de cientos de años dentro de su caja de resonancia.
Más que todo eso tiene el fruto del amor a las cosas, es como esos regalos que uno se esmera en hacer para los que ama… como las cosas hermosas que uno recibe que vienen con tanto amor y por el cual se valoran.
Así como el violín, la película denota una sensibilidad casi artesanal, en que pese que se sabe que es difícil y costoso hacer una película en cinco ciudades del mundo. El trabajo demostrado por todos los detalles demuestra que hubo amor en lo que se hizo, desde la dirección de Francois Girard hasta la maravillosa música de Corigliano.

En el remate se devuelven los descendientes de los antiguos poseedores del violín, todos con la idea de recuperarlo, pero queda demostrado en cierto sentido que el valor sentimental que le tenemos a las cosas a veces es pisoteado por la ambición de los millonarios.

Al final, la historia que nace desde las cartas del tarot de Marsella, vuelve al mazo en el remate de Montreal para comenzar su etapa de renacimiento… así, algunas de nuestras cosas materiales que a veces damos por perdida, aparecen para hacer la pausa que necesitan los bellos recuerdos, nos sientan, nos sitúan y nos demuestran que las hojas que fueron blancas hoy son amarillas, que el sol destiñó los sueños, que no todos los que posamos en la foto o que escribimos en el cuaderno están ahora… y por lo mismo merecen que más los amemos, porque son el testimonio de la existencia.

Saludos a todos

Bonus Tracks
1.- Ficha en IMDB
2.- Comentarios de Filmaffinity
3.- Trailer

4.- Más de la película

lunes, 1 de enero de 2007

LAS INVASIONES BARBARAS


Una de las cosas que dije ayer, mientras hablaba de La piscina, era que no me atrevía a hablar del año, hasta que terminara por completo... y vaya que tuve razón... porque a eso de las 22:00 me vino un dolor al estomago tan fuerte que prácticamente no podía caminar (linda manera de coronar un difícil 2006). Así que tuve que ir de urgencia al médico, lo más cercano que había era un SAPU (Servicio de Atención Primaria de Urgencia), a esa hora no quedaba nadie... y más aún como sería el año nuevo se cerraría... en otras palabras fui la última emergencia del año 2006.
Según el médico que me atendió, de nacionalidad peruana, me dijo en un perfecto castellano, le vamos a colocar una inyección y se tomará unas gotitas... ¿Qué tenía? no sabía, ni ¿qué me inyectaban? tampoco... a veces los médicos creen que uno es idiota y que no estamos capacitados para entender que diablos nos pasa en nuestro propio envase. Bueno al leer la receta entendí que era Colon Irritable, me colocaron la última inyección del 2006... de eso, pasó una hora, y ya empezamos a celebrar el año nuevo, yo ahora cojo entre el dolor de estomago y la inyección, salí a dar mis abrazos y luego a seguir reposando (magistral comienzo de año). A la vuelta mi mamá me preguntó que médico me había atendido, yo le conté que uno peruano...

Ahí empezó uno de los discursos que yo más aborrezco de la gente... la xenofobia, era la segunda vez en menos de dos días que me salían con ese tema, a mi juicio es uno de las bajezas más grandes que puede tener una persona prejuciar a otro por haber nacido en un país extranjero, o ser de otra cultura, Si al final los países son divisiones ficticias, sobre todo en un continente como el de América que comparte un idioma, una historia, una religión común; y a la vez luchamos por la misma injusticia, las mismas dictaduras, los mismos imperialismos y las mismas pobrezas. Entonces de que xenofobia me hablan. Menos contra Perú... un país con una cultura y una riqueza de la cual se sienten orgullosos. Yo respeto y admiro a todos los extranjeros (incluidos algunos europeos que a veces cuando vienen a Chile se sienten superiores). Hay gente que todavía no entiende que mientras más culturas polinizen un país más crecemos todos (algo bueno que tenga la globalización).

Entre hospital y migrantes, mi año nuevo tuvo mucho de la película canadiense Las Invasiones Bárbaras, una película que (aparte de ser muy linda) muestra una visión de lo deteriorado de los servicios de salud, cuando el ex-profesor de historia Remy (Remy Girard) de más de 50 años se enferma, y su hijo (Stephane Rousseau) un ejecutivo que trabaja en Londres vuelve a visitarlo a Montreal, al ver que a su padre está viviendo sus últimos días, comienza a buscar a sus amigos, ex-amantes y alumnos para que su agonía sea más llevadera. Una película que muestra que está pasando en la sociedad que vio caer las Torres Gemelas, que disfruta de la tecnología y la globalización, pero que no quiere perder la esencia fundamental... tratar de ser felices.

Bonus Tracks
1.- La ficha en IMDB
2.- La Página de la película
3.- Les invasions barbares en Wikipedia
4.- Trailer